Día Mundial del Corazón: cómo reducir el colesterol y prevenga

Día Mundial del Corazón: controlar el colesterol es la mejor forma de cuidarlo

Cada 29 de septiembre, el mundo conmemora el Día Mundial del Corazón, una fecha que busca generar conciencia sobre la importancia de cuidar este órgano vital y adoptar hábitos saludables para prevenir enfermedades cardiovasculares.

Entre los principales factores de riesgo se encuentra el colesterol alto, una condición que, aunque silenciosa, puede tener consecuencias graves si no se detecta y controla a tiempo.

¿Cuántas personas sufren del corazón en el mundo?

De acuerdo con cifras médicas, el 24 % de las muertes relacionadas con enfermedad cardiovascular son atribuibles a niveles elevados de colesterol LDL, conocido como el “colesterol malo”. Este tipo de colesterol se adhiere a las paredes de las arterias, reduciendo el flujo sanguíneo y aumentando la probabilidad de un infarto o un accidente cerebrovascular.

La situación es aún más crítica en quienes ya han sufrido un evento cardíaco: los especialistas advierten que los pacientes que no logran regular sus niveles de colesterol después de un primer infarto tienen un 50 % más de riesgo de presentar un segundo episodio.

(Vea también: Arritmia cardíaca: señales de alerta que no debería ignorar)

¿Qué es exactamente el colesterol?

Se trata de una sustancia compuesta por grasas y proteínas que circula por la sangre y cumple funciones vitales, como la producción de hormonas, vitamina D y la síntesis de sustancias que ayudan a digerir los alimentos. Existen dos tipos principales:

  • HDL o colesterol de alta densidad, considerado “bueno”, porque recoge el exceso de colesterol y lo transporta al hígado para ser eliminado.
  • LDL o colesterol de baja densidad, llamado “malo”, ya que se acumula en las arterias y favorece la obstrucción del flujo sanguíneo.

Según la doctora Catalina Hoyos, directora médica de Amgen Colombia, resulta fundamental que las personas conozcan sus niveles de colesterol LDL, pues “cuando este se eleva, las células no logran absorber todo el colesterol y el exceso se adhiere a las arterias, aumentando significativamente el riesgo cardiovascular”.

El cardiólogo e internista Víctor Gil Aldana, director médico del Instituto Cardiovascular del Tolima, enfatiza que gran parte de las causas del colesterol alto están relacionadas con los estilos de vida. El consumo excesivo de grasas saturadas y trans, el tabaquismo, la falta de ejercicio y el estrés son factores que, combinados, elevan los riesgos.

Además, recuerda que el colesterol alto no presenta síntomas visibles, lo que lo convierte en una amenaza silenciosa que solo puede detectarse mediante un perfil lipídico, un análisis de sangre que debe realizarse con frecuencia.

Las recomendaciones generales son claras: las personas mayores de 20 años deberían hacerse un chequeo cada cinco años, mientras que los hombres desde los 35 años y las mujeres a partir de los 45 deberían aumentar la periodicidad de estos controles.

La buena noticia es que mantener niveles saludables de colesterol está al alcance de todos, a través de pequeños pero significativos cambios en el estilo de vida:

  • Aumentar el consumo de frutas, verduras, cereales integrales y grasas saludables como las presentes en el aceite de oliva, aguacate, frutos secos y pescados ricos en Omega 3.
  • Reducir la ingesta de frituras, embutidos, azúcares añadidos, ultraprocesados y exceso de sal.
  • Practicar al menos 30 minutos de ejercicio, tres o cuatro veces por semana.
  • Evitar el tabaco y moderar el consumo de alcohol.
  • Controlar el estrés y procurar mantener un peso saludable.

No obstante, el doctor Aldana advierte que en algunos casos, a pesar de implementar estos cambios, los niveles de colesterol pueden no descender. Situaciones como la diabetes, la hipertensión, el hipotiroidismo, la obesidad, la enfermedad renal o hepática, o los antecedentes familiares, requieren un acompañamiento médico especializado y, en muchos casos, el uso de medicación para regular el colesterol y prevenir complicaciones mayores.

El Día Mundial del Corazón es, por tanto, una invitación a la acción: cuidar este órgano vital empieza por decisiones cotidianas, desde la alimentación hasta los chequeos periódicos. Conocer y controlar los niveles de colesterol no solo alarga la vida, sino que la hace más plena y saludable.