El paso del tiempo es inevitable, pero lo que sí puede elegir es cómo enfrentarlo. Envejecer no significa perder, sino ganar experiencia, sabiduría y una nueva forma de ver la vida. Sin embargo, los mitos sobre la vejez pueden causar miedo e inseguridad, afectando la percepción de esta etapa.
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De acuerdo con Ángela Carrero, psicóloga clínica de los Centros Médicos Colmédica: “El miedo a envejecer puede derivar en ansiedad y depresión. Muchas personas evitan hablar del tema y se aíslan, rechazando experiencias valiosas por temor a sentirse fuera de lugar”.
Mitos más comunes sobre el envejecimiento
A lo largo del tiempo, se han transmitido muchas creencias erróneas sobre la vejez. Romper con estos mitos es clave para vivir esta etapa con plenitud.
Envejecer significa perder autonomía
Realidad: muchas personas mayores llevan una vida activa e independiente. La clave está en mantenerse en movimiento, cuidar la salud y adaptarse a los cambios con una actitud positiva.
La vejez es sinónimo de enfermedad
Realidad: aunque el cuerpo experimenta cambios naturales, envejecer no implica estar enfermo. Con hábitos saludables y chequeos médicos regulares, es posible mantener una excelente calidad de vida.
Después de cierta edad ya no se puede aprender
Realidad: el cerebro mantiene su capacidad de aprendizaje a lo largo de la vida. La neuroplasticidad permite seguir adquiriendo conocimientos y desarrollando nuevas habilidades sin importar la edad.
Las personas mayores ya no disfrutan de la vida
Realidad: el bienestar y la felicidad no tienen edad. Muchas personas en la madurez encuentran nuevas formas de disfrutar la vida y mantenerse activas socialmente.

¿Cómo afrontar el miedo a envejecer?
Si el miedo al envejecimiento le causa ansiedad, es importante cambiar la percepción sobre esta etapa. La especialista recomienda estos consejos :
- Adoptar hábitos saludables: una buena alimentación, ejercicio y descanso adecuado son esenciales para el bienestar físico y mental.
- Cultivar relaciones positivas: rodearse de personas que sumen y comparten experiencias enriquece la vida.
- Vivir el presente: enfocarse en lo que se puede hacer en el momento actual ayuda a reducir la ansiedad sobre el futuro.
- Aprender cosas nuevas: emprender proyectos, desarrollar hobbies o viajar mantiene la mente activa y motivada.
- Evitar pensamientos negativos sobre la edad: cambiar la manera en que se habla del envejecimiento puede impactar positivamente en la percepción de esta etapa.
Envejecer no es perder, sino ganar nuevas experiencias y aprendizajes. Cambiar la perspectiva sobre la edad permite vivir con plenitud y disfrutar cada día con gratitud.
Fuentes utilizadas:
Angela Carrero Gaitán es psicóloga clínica de los Centros Médicos Colmédica con máster en psicología clínica y medicina conductual.