El naproxeno debe consumirse siempre bajo prescripción médica. Se recomienda seguir las dosis indicadas por los especialistas para evitar efectos adversos y maximizar su eficacia.
El naproxeno es un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINES, por sus siglas en inglés) utilizado principalmente para aliviar el dolor, reducir la inflamación y bajar la fiebre.
Su mecanismo de acción inhibe la enzima clave en la producción de sustancias responsables del dolor y la inflamación. Por esta razón, este medicamento es ampliamente recetado para tratar una variedad de condiciones dolorosas, explicó el químico farmacéutico de la Universidad Nacional de Colombia Néstor Díaz Duque para Signos Vitales.
¿Para qué sirve el naproxeno?
Este medicamento es eficaz en el tratamiento de diversos tipos de dolor, incluyendo:
- Muscular: ideal para molestias relacionadas con la actividad física o el estrés cotidiano.
- Espalda: comúnmente utilizado en problemas lumbares o cervicales.
- Menstrual: alivia los síntomas asociados con la dismenorrea (explicación).
- Muela y extracciones dentales: recomendado tras procedimientos odontológicos menores.
- Dolor asociado al resfriado común y gripe: disminuye las molestias corporales típicas de estas afecciones.
- Artritis menor y dolor reumático: mejora la calidad de vida en casos de inflamación articular leve.
- Dolor luego de trauma o cirugía menor: ayuda a controlar el postoperatorio.
Además de ser un potente analgésico, el naproxeno tiene propiedades antipiréticas (reduce la fiebre) y antiinflamatorias, que lo hace útil para pacientes con múltiples dolencias.
Contraindicaciones del naproxeno
El uso de este medicamento está contraindicado en los siguientes casos:
- Alergias: personas con hipersensibilidad al naproxeno, ácido acetilsalicílico u otros medicamentos no esteroideos.
- Problemas respiratorios: pacientes con asma, broncoespasmo, rinitis aguda o pólipos nasales.
- Trastornos de coagulación: no es apto para quienes padecen desórdenes de la coagulación.
- Enfermedad gastrointestinal: contraindicado en casos de úlcera péptica activa, sangrado gastrointestinal o antecedentes de enfermedad ácido-péptica.
- Condiciones cardíacas: insuficiencia cardíaca severa o enfermedad cardiovascular.
- Disfunción hepática: no se debe administrar en pacientes con problemas hepáticos graves.
- Embarazo: su uso está restringido durante la gestación debido a posibles riesgos para el feto.
Naproxeno vs. Ibuprofeno: principales diferencias
Aunque ambos pertenecen al grupo de los AINES, tienen características distintas:
- Duración del efecto: el naproxeno proporciona alivio más prolongado en comparación con el ibuprofeno, lo que lo hace ideal para afecciones crónicas o dolores persistentes.
- Usos específicos: mientras que el ibuprofeno es más común en el manejo de fiebre y dolores leves, el naproxeno se enfoca en condiciones inflamatorias y dolores moderados a severos.
Acción en la desinflamación
El naproxeno destaca por su capacidad de reducir la inflamación de manera efectiva, un atributo clave para pacientes con condiciones reumáticas o lesiones. Su inhibición de la prostaglandina sintetasa (enzima que acelera la formación de sustancias que causan inflamación y dolor) disminuye la inflamación en tejidos afectados, lo que resulta en una notable mejoría de los síntomas.
El naproxeno es un medicamento versátil y eficaz para tratar una amplia gama de dolores e inflamaciones. Sin embargo, es crucial usarlo con precaución, respetando las indicaciones médicas y considerando las contraindicaciones para evitar complicaciones.
Fuentes especializadas:
- Invima (2024). Acta N° 07 de 2024 SEM. Ver documento.
- Mecanismo de acción del naproxeno Vademécum (2024). https://www.vademecum.es/principios-activos-naproxeno-m01ae02
- MPJ (2024). Actualización en farmacología de los antiinflamatorios no esteroideos. Consultar artículo.
- Néstor Díaz Duque, químico farmacéutico de la Universidad Nacional de Colombia, con 15 años de experiencia en el área.