El mundo celebra el Día Mundial de la Higiene de Manos, una iniciativa impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que busca reforzar la importancia de esta práctica como una de las medidas más efectivas para salvar vidas y prevenir infecciones en los entornos sanitarios. En 2025, la campaña “SALVA VIDAS: Limpia tus manos” cumple 17 años y llega con un mensaje claro: el uso adecuado de los guantes médicos no sustituye la correcta higiene de manos.
Los guantes desechables se utilizan comúnmente durante procedimientos médicos para proteger tanto al paciente como al personal de salud. Sin embargo, estos pueden contaminarse con la misma facilidad que las manos desnudas y no garantizan una protección completa frente a microorganismos.
Por eso, la OMS recuerda que deben retirarse después de tocar a un paciente y, de inmediato, hacer el lavado de manos siguiendo los 5 momentos para la higiene de manos, una guía que establece cuándo y cómo hacerlo para prevenir infecciones.
La higiene de manos sigue siendo esencial, incluso con guantes
Independientemente del uso de guantes, la OMS insiste en que la higiene de manos en el momento y la forma adecuados continúa siendo la medida más importante para proteger la salud del personal médico y los pacientes.
Para 2026, el organismo propone que la monitorización y retroalimentación del cumplimiento de la higiene de manos sea un indicador nacional clave, especialmente en hospitales de referencia. Actualmente, solo el 68 % de los países informan estar implementando este seguimiento.
El impacto ambiental del uso excesivo de guantes
Más allá del ámbito sanitario, el uso excesivo de guantes médicos tiene consecuencias ambientales preocupantes. Usarlos cuando no es necesario no reduce la transmisión de gérmenes y genera un volumen considerable de residuos hospitalarios.
Según datos recientes, un hospital universitario promedio produce 1.634 toneladas de residuos sanitarios al año, cifra que ha aumentado entre un 2 % y 3 % anualmente, sobre todo desde la pandemia de COVID-19. Los países con mayores recursos son los que generan más desechos, lo que refuerza la necesidad de implementar prácticas más sostenibles.
Reducir el uso innecesario de guantes no solo optimiza los recursos, sino que también disminuye la huella ambiental del sector salud. Promover el lavado de manos adecuado y racionalizar el uso de guantes son acciones clave para equilibrar la protección sanitaria y el cuidado del planeta.
WHHD 2025: reforzando compromisos globales
La edición 2025 del Día Mundial de la Higiene de Manos se enmarca en una etapa crucial: los países deben acelerar la implementación del Plan de Acción Mundial sobre Prevención y Control de Infecciones (PCI) y el Marco de Monitoreo 2024-2030 de la OMS. Estos lineamientos buscan garantizar un acceso universal y seguro al agua, saneamiento e higiene (WASH), así como una gestión adecuada de los residuos y la electricidad en los centros de atención médica.
El Marco de Acción de la OMS 2024-2030 también integra el componente climático y ambiental, subrayando la necesidad de que los sistemas de salud incorporen el manejo responsable de agua, saneamiento e higiene dentro de su planificación, financiación y seguimiento.
Promover buenas prácticas salva vidas
La OMS invita a los gobiernos, instituciones y profesionales de la salud a fortalecer las estrategias nacionales de higiene de manos dentro de los programas de prevención y control de infecciones, incluyendo su adopción en los procedimientos operativos estándar de cada establecimiento. Además, resalta la importancia de concienciar sobre el impacto ambiental del uso innecesario de guantes, un paso esencial hacia la sostenibilidad sanitaria.
En este Día Mundial de la Higiene de Manos 2025, el llamado es claro: lavarse las manos sigue siendo el acto más sencillo y poderoso para salvar vidas. Practicarlo correctamente, junto al uso responsable de guantes, no solo protege la salud, sino también el planeta.